Robótica con sensibilidad con el robot de construcción ligera LBR iiwa de KUKA se enfrenta al locutor de radio «Fleischi» para servir cerveza de trigo.

¿Quién es más rápido? «Paulii» y «Fleischi» intentan coronar a la perfección la cerveza de trigo.

Robótica con sensibilidad.

El arte de servir una cerveza de trigo es la disciplina maestra detrás de una barra. En el nuevo anuncio de la marca Paulaner, la tradición de la cerveza de trigo se enfrenta a la innovación robótica con sensibilidad. La tarea es la siguiente: ¿quién es el más rápido en servir la cerveza de trigo perfecta? Para ello, el locutor de radio Bernhard Fleischmann y Paulii, como se bautizó al robot de construcción ligera LBR iiwa de KUKA para este anuncio, se encuentran en una cervecería tradicional al aire libre de Paulaner. Comienza la competición entre Fleischi y Paulii, locutor de radio y profesional de la cerveza de trigo contra el robot y amante de la cerveza de trigo.

Locutor de radio y LBR iiwa nos demuestran la robótica con sensibilidad.

Locutor de radio y LBR iiwa nos demuestran la robótica con sensibilidad.

Con los ojos tapados y sin sistema de cámara, la disciplina empieza con las mismas condiciones iniciales. Los vasos se apoyan en la botella formando un ángulo y las primeras gotas de cerveza van deslizándose por el vaso.

Encantadora puesta en escena de la colaboración hombre-robot.

En este anuncio publicitario se representan de una forma encantadora la colaboración hombre-robot (MRK) y la programación orientada al objeto del robot, el núcleo de «Industria 4.0». El compañero robot ya asistió al personal de servicio durante la Feria de Hannover 2015 detrás de la barra, ayudando a servir cerveza.

Robot KUKA LBR iiwa denominado Paulii para el anuncio de cerveza.

Robot KUKA LBR iiwa denominado Paulii para el anuncio de cerveza.

Codo con codo con sus compañeros humanos, el robot realizó todos los pasos necesarios por sí mismo: cogió una botella de cerveza llena, la abrió, cogió un vaso, lo enjuagó y vertió la cerveza de trigo con una forma perfecta. Este compañero mecánico también se encargó del proceso de enjuague.

La robótica con sensibilidad permite la más elevada forma de colaboración.

¿Y cómo funciona? Muy sencillo: el LBR iiwa posee delicados sensores de momentos de articulación en los siete ejes. Gracias a ellos, con ayuda del peso puede detectar si una botella está llena o vacía, coger el vaso sin romperlo y abrir la botella empleando la fuerza correcta. Este robot de construcción ligera no representa peligro alguno al trabajar junto con el ser humano. Es como si fuera un compañero de trabajo más, que, por supuesto, también respeta la normativa de higiene y no mete la botella en la cerveza al servirla. Así que: ¡salud!

Desarrollado en esta web por tecnoplc.com. Documento original en www.kuka-robotics.com